El pasado 3 de junio quedó habilitado el Paseo Italia, en 24 de Septiembre al 1.000. Se trata de una propuesta de la Sociedad Italiana y del municipio, que pusieron manos a la obra con esculturas y futuros locales gastronómicos.
Las esculturas elegidas, todas hechas en Tucumán, se agrupaban en una secuencia lineal de tiempo: la fundación de Roma (la clásica de la Loba); el Imperio, con Julio César; el Renacimiento, con el David de Miguel Ángel; y el final de ese período.
“Queríamos hacer más, pero ya era sobrecargarlo al Paseo, entonces hemos tomado solamente esa parte de la historia”, había dicho el presidente de la Sociedad y cónsul de Italia en la provincia, Sergio Ricciuti. Sin embargo, la flamante obra no duró nada.
Es que en las últimas horas, vándalos se robaron la figura de Remo y hasta retiraron la chapa de referencia, ubicada debajo de la loba.
Anticipando esta situación y teniendo en cuenta la importancia de la seguridad, en especial contemplando los actos de vandalismo tan comunes en los espacios públicos de Tucumán, el cónsul había comentado la intención de pedirle al municipio que colabore aportando guardias urbanos. Sin embargo, antes que nada llegaron los vándalos.